LUBINA EN SALSA LACTEA
Con este sugestivo nombre me gustaría presentaros una receta exquisita que descubrí no hace mucho tiempo y que me permitió preparar una magnífica lubina sin prácticamente mancharme las manos, puesto que el protagonista principal de esta receta es el horno, amigo mío inseparable que como ya sabéis, cocina solo.
Para preparar este plato, para dos personas, necesitamos un lubina fresca de aproximadamente 1 kilo, limpia, desescamada y abierta en libro (eso nos lo hacen en la pescadería). El resto de los ingredientes son bien sencillos: media cebolla, 1 tomate maduro, sal, pimienta o eneldo, 1 huevo y 1 bote pequeño de nata para cocinar, 2 lonchas de queso de fundir
En una fuente de horno, ponemos un chorrito de aceite de oliva y lo extendemos sobre la fuente. Añadimos sal a la lubina por los dos lados y o bien pimienta o bien eneldo (yo prefiero esta última especia, es mas sabrosa).
Cortamos la cebolla en juliana y el tomate en rodajas y lo ponemos sobre el pescado, ahora mezclamos ½ vaso de nata con el huevo y añadimos la mezcla por encima. Añadimos un poco más de sal.
Metemos la fuente en el horno caliente a 180º durante 1 hora. Cuando lleve 40 minutos de cocción abrimos el horno y ponemos encima las dos lonchas de queso para fundir.
Os aseguro que vais a disfrutar de un pescado finísimo, de textura deliciosa por poco dinero y de una forma totalmente innovadora…. Os animo a probarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario